Las primeras intervenciones han sido de las enfermeras especialistas en Geriatría, Maite Basterra y María Muñoz. Han ofrecido la conferencia “Valoración de necesidades y cuidados durante la hospitalización”. Han cerrado el taller dos familiares de persona con demencia y miembros de AFAN, Kati y Toño. Han hablado de "La repercusión que tiene la enfermedad en la vida del cuidador principal".

En esta última charla tres palabras han sido las protagonistas. Amor (mucho), Dolor (muchísimo), pero también Humor.

Kati ha explicado cómo estas tres palabras forman parte de su vida diaria con su madre, enferma de Alzheimer. Ha reconocido que en el día a día "hay mucho amor, aunque a veces se tambalee, porque les reñimos. No nos debemos de culpabilizar por ello".

También ha hablado del dolor "sobre todo cuando te dan el diagnóstico". Es entonces cuando llegan las preguntas de cómo voy a afrontarlo, porque, como ella misma reconoce "has leido, has estado con personas que tienen familiares con Alzheimer, pero a tí nunca te ha tocado estar en estas circuntascias". Pero, y ha regresado al amor, "como hay mucho amor, vamos a tirar para adelante con la ayuda de los profesionales y con la ayuda de la gente que está pasando por lo mismo que nosotros".

Y, al final, también se ha referido al humor, asegurando que "buscar el lado del humor te ayuda, te alivia el dolor. Hay que saber disfrutar mutuamente. Por ejemplo, si mi madre es feliz y se rié cuando le estoy contanto un cuento, adelante. Verla feliz nos va a evitar ese sufrimiento. Necesitamos vivir con humor, seguirles la corriente, evitar razonar con ellos, porque terminas por agotarte y enfadarte".

Conferencias en primera persona que han servido para compartir experiencias, resolver dudas y exponer situaciones ante las que se han intentado encontrar soluciones.