¿Por qué toma la decisión de presentarse a la Presidencia de la SNGG? Y ¿cómo han sido los primeros días/meses al frente de la SNGG?

Como médico especialista en Geriatria, el motivo de mi decisión es seguir trabajando en la mejora de la salud integral y de la asistencia de los mayores de Navarra.  Creo que la Sociedad juega un papel importante como dinamizador de todo lo relacionado con la Geriatría y Gerontología en Navarra, y por eso decidí dar un paso al frente y aportar todo lo que pueda.

¿Qué objetivos se marca a corto, medio y largo plazo?

A corto plazo, consolidar mi equipo de trabajo en la Junta de la Sociedad y elaborar el plan de acción para los próximos años. A medio plazo, seguir promoviendo las actividades que impulsa habitualmente la Sociedad, por ejemplo, el Congreso, los premios, los grupos de trabajo, la revista, para ajustarlas a las exigencias del momento actual. A largo plazo, aunque aún no hemos definido un plan de acción, queremos dar más visibilidad de nuestra sociedad científica en nuestra comunidad, defendiendo los derechos de las personas mayores, atendiendo sus necesidades; agrupando y representando a todos los profesionales  que trabajan en el campo de la Geriatría y Gerontología en sus múltiples disciplinas; seguir fomentando el avance, el conocimiento, la formación  sobre el  envejecimiento;  proporcionar y mantener relaciones con las diferentes entidades u organizaciones  públicas o privadas, con el  objetivo de seguir promoviendo la imagen positiva de las personas mayores en nuestra sociedad. Además  de  crecer en  el número de socios y  entidades colaboradoras para el sostenimiento de la sociedad.

¿Cómo definiría a su equipo directivo; en definitiva, a su equipo de trabajo?

Creo que es un gran equipo, multiprofesional y con una adecuada combinación de personas con gran experiencia y otras más jóvenes con una gran ilusión. Pero ya dice el refrán que “es más fácil predicar que dar trigo”, y prefiero que sea nuestro trabajo y sus frutos los que vayan marcando nuestro nivel.

¿Cómo calificaría a la Geriatría y a la Gerontología en Navarra?

En mi opinión, queda mucho por hacer,  en un doble sentido. Por una parte, todavía existen carencias en la atención geriátrica en Navarra, al igual que otras comunidades, donde no se da respuesta de una forma adecuada a la transformación de la estructura demográfica y social que está en marcha. Cada vez hay una mayor necesidad de una asistencia geriátrica especializada, multidisciplinar, integral, de calidad, centrada en las personas y no solo en las enfermedades;  proporcionada por  profesionales  formados tanto en el campo de la Geriatría como el de la Gerontología.  Así como la necesidad de establecer estrategias preventivas, el denominado envejecimiento activo,  junto con   la prevención y tratamiento del deterioro funcional o discapacidad.

Por otro lado, tampoco se está aprovechando todo el potencial que ofrece la población de mayores para el bienestar del conjunto de la sociedad. Los mayores tienen mucho que ofrecer, y es importante que su contribución se potencie y se reconozca.. Es necesario la puesta en marcha de  políticas y estrategias que valoren la contribución de las personas de edad a sus familias, comunidades y economías, y que les permitan mantener un nivel óptimo de bienestar.

¿Qué papel juega la SNGG en las personas mayores navarras, siendo una de las sociedades más activas en Navarra no solo por llevar 25 años trabajando para y con los adultos, sino también por su continua actividad con un 2016 plagado de actos?

Nuestra Sociedad es modesta en cuanto a personas y medios, pero creo que tiene un papel importante en cuanto a la formación de los profesionales y la dinamización y sensibilización del conjunto de la sociedad navarra. Una prueba de ello es, efectivamente, el programa de actividades realizado en 2016, aunque hay que reconocer que se ha hecho un esfuerzo especial al tratarse del 25 aniversario de la Sociedad. Este esfuerzo hay que agradecérselo especialmente a mi predecesor en el cargo, Nicolás Martínez Velilla, y a todo su equipo.

Los números dicen que en 2050 más del 30% de la población será mayor de 65 años, de ahí la importancia que ya tiene y tendrá la Geriatría y la Gerontología. ¿Cree que se están dando los pasos adecuados para atender de forma correcta a la población mayor ahora y en un futuro?

Ya he respondido a este aspecto. Creo que no. Hay una actitud generalizada de negación del problema. Quizás influya en ello la visión a corto plazo que impone nuestro sistema político, o tal vez carencias más profundas de nuestra sociedad. Pero visto desde fuera, resulta increíble que no se inicie ya una política seria con visión estratégica. El informe mundial sobre el envejecimiento y salud, realizado por la OMS 2015,  hace  hincapié en que el envejecimiento saludable es algo más que la ausencia de enfermedad. Para la mayoría de las personas, lo más importante es mantener su capacidad funcional y autonomía personal. Los gastos generados para promover y mantener la funcionalidad son mucho menores que las consecuencias derivadas de este problema. El enfoque recomendado ante el envejecimiento de la población requiere la transformación de los sistemas de salud de un modelo curativo a la prestación de cuidados integrales, centrados en las necesidades de las personas mayores.

Por tanto, ¿es necesario potenciar todo lo relacionado con el envejecimiento activo?

El envejecimiento activo pretende mejorar la calidad de vida de las personas a medida que envejecen, favoreciendo sus oportunidades de desarrollo para una vida saludable, participativa y segura. El envejecimiento activo implica entender esta etapa de la vida como un ciclo más de crecimiento personal, añadiendo "vida a los años y no solamente años a la vida",  rompiendo con el estereotipo de una época de la vida asociada a la enfermedad, discapacidad y a la pérdida. Significa dar a las personas mayores la posibilidad de participar plenamente en la sociedad, fomentar sus oportunidades de empleo, de voluntariado y de programas intergeneracionales. El que puedan vivir con independencia, autonomía adaptando la vivienda, las infraestructuras, la tecnología y el transporte. Pero para promoverlo a gran escala hace falta una estrategia social con políticas a largo plazo, y, en este momento, se trata más de una aspiración de asociaciones como la nuestra o de actitudes personales que de un movimiento social, como realmente debería llegar a ser.

Un llamamiento para que las personas colaboren con la SNGG en cualquiera de sus facetas.

El envejecimiento de la población puede considerarse un éxito de las políticas de salud pública y el desarrollo socioeconómico, pero también constituye un reto para la sociedad, que debe adaptarse a ello para mejorar al máximo la salud y la capacidad funcional de las personas mayores, así como su participación social y su seguridad.  Debemos trabajar conjuntamente dentro de nuestra sociedad científica para  dar respuesta a este desafío y mejorar la calidad de vida del colectivo de mayores en nuestra comunidad.

Un reto para 2017 ¿Qué le gustaría conseguir en su primer año como Presidente de la SNGG?

Tener nuestro Plan Estratégico listo y aprobado en la próxima Asamblea de la Sociedad.